Las hospederías están en la mira de los inspectores

Daily NK reveló que equipos de inspección enviados a áreas limítrofes en los días posteriores a la ejecución de Jang Song Taek, han cambiado de objetivo para buscar y expulsar viajeros no registrados. Una fuente de la provincia de Yangkang informó la noticia el día 6, y confirmó que las autoridades han estado revisando conocidas acomodaciones en la ciudad de Hyesan.


“Los huéspedes que procedan de diferentes regiones son enviados de regreso”, explicó. “Incluso cuando alguien tiene su identificación y permiso de viaje en regla, se le solicita abandonar el lugar en un plazo de 24 a 48 horas”.


De acuerdo con la fuente, las órdenes establecieron que los no-residentes que no tengan un objetivo de viaje claramente definido y legítimo deben irse. Esto ha afectado a los comerciantes mayoristas en viaje quienes, según las fuentes, están en una “situación desesperada”.


“Las posadas cercanas a estaciones de tren están siendo intensamente investigadas. A los dueños que no cumplan las órdenes se les inspeccionarán sus instalaciones por la fuerza”.


Como ha sido informado anteriormente, los equipos de inspección (que se piensa contienen estudiantes universitarios afiliados al Ministerio de Seguridad Pública), estarán en la región fronteriza hasta el 16 de febrero, el aniversario del nacimiento del anterior líder Kim, Jong Il.


“Los equipos han ampliado el alcance de sus investigaciones al incluir posadas, con el fin de producir resultados. Las familias que no han registrado sus negocios con las autoridades han tenido que ocultar a sus huéspedes, para evitar multas severas”.


“Hospederías” de este tipo son un fenómeno relativamente nuevo en Corea del Norte. Se multiplicaron cuando el Estado dejó de proveer acomodaciones a visitantes regionales durante la crisis de los años noventa. La mayoría de estos lugares son negocios familiares que ofrecen habitaciones a muy bajo costo. Sin embargo, no tienen estatus legal, por lo tanto son inestables y susceptibles a sobornos.


Aunque duras, esta clase de medidas no son completamente desconocidas. En primer lugar, la represión contra las poblaciones flotantes en las zonas fronterizas es común durante el invierno. Esto se debe a que los meses fríos facilitan el escape del país, ya que los ríos Tumen y Yalu se congelan. Adicionalmente, el período de elección de la Asamblea Suprema del Pueblo (SPA, por sus siglas en inglés) será el próximo mes, elección que ocurre cada cinco años. Esto otorga a las autoridades la oportunidad de tomar medidas severas contra la desaparición de residentes en la frontera.